La alergia al polen, también conocida como rinitis alérgica estacional, afecta a millones de personas cada primavera. Se produce cuando el sistema inmunitario reacciona de forma exagerada al entrar en contacto con los granos de polen, generando molestias que pueden interferir en la vida diaria. Reconocer los síntomas y adoptar hábitos saludables es clave para llevar mejor esta época del año.

 

Síntomas más comunes de la alergia al polen

Los síntomas suelen aparecer en nariz, ojos y vías respiratorias:
 

• Respiratorios: estornudos frecuentes, congestión, tos o sensación de falta de aire.
   
• Oculares: lagrimeo, picor, enrojecimiento y ojos llorosos.
   
• Generales: cansancio, dolor de cabeza o irritabilidad, provocados por la dificultad para dormir bien.
   

Estos signos suelen intensificarse en los días de mayor concentración de polen.

Medidas para reducir la exposición al polen

Aunque no se puede evitar la polinización, sí es posible disminuir el contacto con estos alérgenos:
 

• Mantén las ventanas cerradas en casa y en el coche durante los días de alta concentración.
   
• Ventila el hogar en las primeras horas de la mañana o al anochecer, cuando la cantidad de polen es menor.
   
• Al llegar de la calle, cámbiate de ropa y dúchate para eliminar el polen acumulado en la piel y el cabello.
   
• Evita tender la ropa al aire libre en plena temporada de polinización.

Cómo aliviar los síntomas en casa

Tu hogar puede convertirse en un refugio si lo mantienes libre de polen y polvo. Algunas medidas útiles son:
 

• Utilizar purificadores de aire con filtro HEPA, capaces de atrapar partículas diminutas.
   
• Aspirar con frecuencia alfombras, suelos y sofás con aspiradoras equipadas con filtro HEPA, que retienen polen y otros alérgenos.
   
• Lavar textiles como cortinas, fundas y cojines regularmente.
   
• Mantener un nivel adecuado de humedad interior para evitar irritaciones.
   
   

Tecnología al servicio del bienestar

Además de medicamentos y hábitos saludables, la tecnología doméstica puede marcar la diferencia:
 

• Purificadores de aire con sensores que ajustan automáticamente la potencia según la calidad del aire.
   
• Aspiradoras con filtro HEPA, como las de Rowenta, que capturan hasta el 99,98 % de partículas finas para mantener tu hogar libre de polen, polvo y alérgenos.
   
• Apps de previsión de polen que permiten planificar salidas en los momentos de menor riesgo.
   

 

Tratamientos médicos y soluciones recomendadas

Además de los hábitos de prevención, el tratamiento médico puede ser necesario:
 

• Antihistamínicos para reducir estornudos y picor. Siempre recetados por un médico.
   
• Sprays nasales y descongestionantes para aliviar la congestión.
   
• Inmunoterapia (vacunas contra la alergia) en casos de síntomas intensos o crónicos.
   

Siempre es recomendable consultar con un alergólogo para recibir un tratamiento adaptado a cada caso.

Consejos para la vida diaria en temporada de polen

• Usa gafas de sol al salir para proteger los ojos del polen.
   
• Consulta los calendarios de polinización y apps de alertas para anticiparte a los días más complicados.
   
• Evita actividades al aire libre cuando la concentración de polen es muy alta, especialmente por la tarde.
   
• Mantén la hidratación: beber agua ayuda a aliviar la sequedad de las mucosas.
   

¿Cómo calmar la alergia de forma natural?

Para calmar la alergia de forma natural puedes ventilar en horas de poco polen, usar lavados nasales con suero fisiológico, mantener la casa libre de polvo con aspiradoras con filtro HEPA, consumir líquidos para hidratar mucosas y aplicar compresas frías en los ojos para aliviar el picor.

Alimentos y hábitos que pueden ayudar

La alimentación también juega un papel importante en cómo responde tu cuerpo a los alérgenos. Algunos consejos útiles son:
 

• Frutas y verduras ricas en vitamina C (naranja, kiwi, pimiento, brócoli): ayudan a fortalecer el sistema inmunitario.
   
• Alimentos con omega-3 (pescados azules, semillas de lino, nueces): tienen propiedades antiinflamatorias que pueden reducir la intensidad de los síntomas.
   
• Infusiones de hierbas suaves como la manzanilla o el té verde, que ayudan a aliviar irritaciones leves y a mantener la hidratación.
   

Además de la dieta, mantener un estilo de vida saludable, con ejercicio moderado y un descanso adecuado, puede hacer que los síntomas se toleren mejor.

Diferencias entre alergia al polen y resfriado común

Muchas veces los síntomas se confunden con un resfriado. Sin embargo, hay señales que ayudan a distinguirlos:
 

• Duración: el resfriado suele desaparecer en una o dos semanas, mientras que la alergia dura toda la temporada de polinización.
   
• Mucosidad: en la alergia suele ser clara y acuosa, mientras que en el resfriado es más espesa.
   
• Fiebre: poco común en la alergia, más frecuente en infecciones respiratorias.
   

Conocer estas diferencias es clave para no automedicarse y consultar con un especialista si las molestias persisten.

Cómo preparar tu hogar antes de la temporada de polen

Una buena estrategia es anticiparse a los meses de primavera. Algunas medidas prácticas son:
 

• Revisar los filtros de aire acondicionado y sustituirlos si es necesario.
   
• Invertir en aspiradoras con filtro HEPA para limpiar alfombras, sofás y colchones antes de que empiece la polinización intensa.
   
• Reducir textiles que acumulen polvo y polen, como cortinas pesadas o alfombras, y optar por materiales lavables.
   
• Planificar limpiezas más frecuentes en zonas donde pasas más tiempo, como el dormitorio y la sala de estar.